martes, 16 de octubre de 2007

San Lucas comenzó el curso

Granada tiene dos grandes periodos en el año que marcan la vida de la ciudad, el verano y el curso universitario. El primero es de máxima tranquilidad para la ciudad, de poco ambiente nocturno, de mínima afluencia en las zonas comerciales. Es como un periodo de hibernación que transcurre mientras la ciudad espera la llegada de la población universitaria. Y es que Granada no sería la misma sin su Universidad, sin los alrededor de 80.000 estudiantes que ocupan la ciudad, que son protagonistas de su día a día.

Y nadie hace caso a los calendarios oficiales porque hay estudiantes que se incorporan un poco más tarde, hay quien debe esperar a la segunda adjudicación, novatos y novatas que aún buscan alojamiento, erasmus que retrasan su llegada, y siempre alguien que prefiere prolongar sus vacaciones hasta el puente del Pilar. Pero existe una fecha tope que marca el comienzo de la plena actividad en la Universidad de Granada.

San Lucas, patrón de la Facultad de Medicina, hoy se ha hecho presente en las calles de nuestra ciudad gracias al alumnado de esta facultad. Para mi es como el disparo que marca el inicio de la vida universitaria entendida en su más amplio sentido. Un periodo que llegará a su fin el próximo mes de mayo, con una fiesta final, la de las Cruces.
Hasta ahora cualquier atisbo de fiesta o botellón era un simple juego infantil. Con este comienzo del curso volvemos a tener pub ambientados de lunes a domingo, barriles pro-viajes de fin de carrera, fiestas en los pisos, y como no, botellones. Volvemos a ver como el fenómeno del botellón reaparece en la ciudad al igual que las plantas florecen al llegar la primavera. Y continuaremos en la búsqueda de un modelo de convivencia social que respete el derecho al descanso de la vecindad y el derecho al ocio de la juventud.

Hasta ahora la solución aportada por el consistorio ha sido la de permitir el botellón en una zona deportiva junto a la circunvalación. Pero si algo ha demostrado el fenómeno del botellón a lo largo de su historia ha sido su continuo cambio, y no sabemos cuanto tiempo permanecerá en el estado actual. Aunque lo que más me preocupa no son los previsibles cambios que sufra este fenómeno, sino la falta de previsión de nuestro Ayuntamiento. Las elecciones municipales pasaron, se enfrentan a cuatro años de gobierno, y no tienen ninguna propuesta que permita dormir tranquila a la vecindad y disfrutar alegremente a la juventud. O acaso piensan organizar de nuevo los macrobotellones por los que consiguieron que se conociera a nuestra ciudad en todo el mundo, o tal vez, mirar a otro lado y no reconocer un fenómeno que no se puede eliminar de la noche a la mañana, pero al que se le deben dar respuestas.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

San Lucas es, quizá por las fechas, la Fiesta de los estudiantes, con mayúsculas. En la época de Derecho, lo pasábamos de coña. No sé cómo será ahora, pero imagino que el cebollón será el mismo de entonces... o peor.

Fdo. Patón.

Anónimo dijo...

Tb me ha traído muchos recuerdos San Lucas. Es curioso cómo distintas generaciones de estudiantes nos sentiremos identificados con tu post, a pesar del paso del tiempo.

Javier, te leo siempre, aunque no te haya comentado apenas.

Buen día!

Anónimo dijo...

Yo identifico S Lucas con la feria de Jaén, donde estuve hasta el 83. Por cierto, con muy buenos recuerdos, ejem.
Un abrazo
Rigoletto

Predilecto dijo...

Habra que ir....

Tomo noto.Ya algunos de mis compañeros llevan semanas diciendonos de pasar un finde en Granada. Y tus palabras son un buen aliciente.

Un saludo.

Blogosfera Progresista